 |
| Portada de "La fuente de la eterna juventud" |
A principios del siglo XVI, una época llena de oportunidades y peligros, un joven leonés y montañés, Hernando de Escalante, decide emprender un camino propio en la vida enrolándose en los tercios españoles. La contemplación del cuadro de "La fuente de la eterna juventud", del pintor alemán Lucas Cranach el Viejo lo invitan a una reflexión intimista sobre el sentido de la vida. Su participación en la batalla de Mühlberg (1547) le hace comprender la violencia, la tragedia y el dolor implícitos en la sociedad de su tiempo. También descubre el amor, en la persona de Martina, en tierras germánicas, lo que trastorna y profundiza su problemática visión de la vida y sus avatares. El sentimiento de la amistad también crece en él muy arraigadamente cuando se hace amigo del mochilero Francisco.
Regresado a su patria, decide emprender otra aventura de gran calado: viajar a América, donde vive muchas aventuras, a veces nobles, a veces tabernarias, en el entorno de las nacientes ciudades iberoamericanas. Alfabetizando a niños indígenas de La Española comprende el valor de la educación y el infinito potencial de la letra escrita. De nuevo su corazón lo lleva a experimentar las consecuencias del amor en una situación límite donde la realidad pierde su perfil y lo imaginario o fantástico lo sumergen en una vivencia de ensueño. Avaricia, violencia, rencor y generosidad se mezclan en personajes turbios que parecen gozar de impunidad.
No del todo satisfecho con su vida entre indígenas,aún buscándose a sí mismo, regresa a España, para encontrar otras facetas del dolor y la amargura a través de la muerte de los seres queridos. Al fin, se reconcilia consigo mismo, con la vida y con las limitaciones a través de una aceptación sabia de los límites humanos. No se puede alcanzar todo lo que se desea, pero sí es deseable todo lo que nos haga felices y no perjudique a los demás.
Esta narración, entre el realismo histórico y la fantasía racional, es una invitación a la reflexión sobre las inquietudes del hombre en su etapa juvenil, así como una contemplación melancólica acerca de las limitaciones materiales y emocionales de la vida del hombre común en una etapa fascinante de España, como fue el siglo XVI. Ofrece interesantes temas de reflexión: la amistad, el amor, la educación, la guerra, el choque de culturas y la posibilidad de la felicidad en un ambiente muy determinado: la España renacentista en el entorno de la colonización de América.
La novela invita, sutilmente, a una reflexión constante sobre la vida de los jóvenes en el siglo XVI, la importancia del descubrimiento y colonización de América en los españoles de la época, el difícil acomodo entre los deseos personales y las normas y rutinas sociales, etc. El lector, además de seguir una trama, entra en un diálogo sin palabras con el texto y ha de extraer sus conclusiones personales, de modo que la riqueza de la lectura es amplia, original y sorprendente.
Escrita con estilo suave, fluido, significativo y transparente, esta narración es de lectura agradable y amena; con su tendencia a la precisión y variedad lingüística, satisface por igual el gusto del lector juvenil y del adulto.
La novela consta de 245 páginas. Se puede adquirir en versión electrónica por 3 €; o en papel, pasta blanda, por 7 €, en:
https://www.amazon.es/fuente-eterna-juventud-Valc%C3%A1rcel-Mart%C3%ADnez-ebook/dp/B0191M2RQM
El precio: 2,99 €; se puede descargar para lectura gratuita bajo ciertas condiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario