Baíña, Pontevedra (VIII-2020) © SVM |
MARIO BENEDETTI - La vida ese paréntesis
Cuando el no ser queda en suspenso 1
se abre la vida ese paréntesis
con un vagido universal de hambre
somos hambrientos desde el vamos
y lo seremos hasta el vámonos 5
después de mucho descubrir
y brevemente amar y acostumbrarnos
a la fallida eternidad
la vida se clausura en vida
la vida ese paréntesis 10
también se cierra incurre
en un vagido universal
el último
y entonces sólo entonces
el no ser sigue para siempre 15
- ANÁLISIS
1)
Resumen
Mario Benedetti (Paso de los Toros,
Uruguay, 1920 - Montevideo, 2009) fue un prolífico escritor uruguayo que nos
dejó títulos perdurables de indudable calidad en ensayo, poesía, cuento y
novela (también realizó incursiones en teatro). Testigo del convulso siglo XX
hispanoamericano, su literatura da fe de unos tiempos confusos y violentos, sin
perder nunca la esperanza.
Ahora vamos a comentar un poema de
naturaleza existencial; el sujeto lírico reflexiona sobre la vida del hombre.
Destaca de ella su brevedad y fugacidad: corta y de paso rápido. Nacemos con un
grito o llanto (“vagido”) reclamando alimentos; con estos comienzos, parece que
nada bueno se puede esperar. Crecemos con hambre (y no solo física, sino
emocional, intelectual, etc.) y, por un momento, creemos que la vida es larga.
Sin embargo, pronto llega la muerte, sin pensarlo; morimos con otro grito, pero
esta vez de angustia porque nuestra vida se acaba. Aquí quedará la vida, pero
para el difunto es la nada, el no ser para siempre, lo cual constituye una
desagradable paradoja.
2.
Tema
El tema del poema se recoge muy bien en el
título: la vida es muy breve y fugaz, teñida de inconsciencia y dolor en su
tránsito.
3.
Apartados temáticos
El poema presenta una estructura muy
unitaria; todo el poema desarrolla un pensamiento compacto y razonado: la vida
es un camino corto, fugaz y con algunas asperezas. Es solo un paréntesis en la
línea del tiempo, que ya estaba y seguirá después de la desaparición de la
persona.
4.
Aspectos métricos y de rima
Este poema está compuesto por quince
versos agrupados en cuatro estrofas con un número variable de versos en cada
una de ellas. Los versos son de medida variable; van del trisílabo an
endecasílabo. No existe ningún tipo de rima. Estamos, pues, ante un poema en
verso libre, típico de la poesía contemporánea, donde las formas clásicas de
composición han perdido terreno.
5.
Comentario estilístico
El poema presenta un tono sombrío,
reflexivo y pesimista. Conviene notar la falta de puntuación en todo el poema;
no se separan enunciados ni oraciones. Eso crea un efecto sorprendente de
lectura; el lector ha de restituir mentalmente la puntuación para dotar al
poema de un sentido coherente; es un rasgo típico de la poesía contemporánea y,
en concreto, de la poesía más coloquial y popular.
El sujeto lírico reflexiona sobre la
trayectoria del “ser”, es decir, del hombre. En el momento de nacer, cuando el
hombre “queda en suspenso”, metáfora del estupor, uno emite un llanto, tal vez
de alegría al nacer, tal vez de tristeza al morir; el poema no lo aclara. La palabra
clave es “vagido” (v.3): grito, que es “de hambre” (acaso material, acaso
espiritual o emocional; el lector ha de rellenar el blanco que el sujeto lírico
dejó abierto). La metáfora más importante es “la vida ese paréntesis”: nuestra
existencia no es más que una breve aclaración tangencial al gran libro
universal; ni quita ni pone.
La segunda estrofa comienza con una
derivación o políptoton (“hambre” - “hambriento”), reforzando la significación
de necesidad del hombre. Nombra el presente, el pasado y el futuro de manera
metafórica, a través de verbos conjugados en tiempos verbales correspondientes
a esas nociones --no en pasado--. “Vamos”, “seremos” y “vámonos” indican el
movimiento hacia adelante e imparable de
la vida. Por el camino queda “descubrir” y “brevemente amar”, es decir, una comprensión
de qué es el mundo y el hombre y una satisfacción sentimental efímera. El
descubrimiento que realiza el hombre es que todo es “una fallida eternidad” (v.
8).
La tercera estrofa repite tres veces la
palabra “vida”, lo que declara bien que es el núcleo de significación más
importante. Se abre con una paradoja: “la vida se clausura en vida” (v.9),
insistiendo que no hay escapatoria. Se repite la metáfora de la vida como un
paréntesis en un escrito: algo breve y circunstancial. El poema comienza a
cerrarse en sí mismo porque ahora también se repite el “vagido”, pero para
anunciar la muerte. Ese grito está acompañado de dos adjetivos terribles:
“universal” y “último”; significan que afecta a todos los vivos y que con él
llega la muerte, inevitable e indiferente.
Se cierra el poema con una breve cuarta
estrofa que contiene una repetición (“entonces”) y una paradoja (“el no ser
sigue para siempre”). Hay continuidad, pero de la inexistencia, de la nada. El
cierre es tétrico y demoledor.
Elementos importantes en la composición
estilística del poema (y, en general, de toda la literatura benedettiana) son:
la falta de puntuación, el lenguaje sencillo, el tono coloquial, como
conversacional y la presencia envolvente del sujeto lírico, que nos da el
mensaje hecho y apela al lector para que lo considere y acepte.
6. Contextualización
Como ya afirmamos, Mario Benedetti (Paso
de los Toros, Uruguay, 1920 - Montevideo, 2009) es uno de los más sugestivos y
originales poetas del siglo XX en el ámbito hispanoamericano. Su producción
literaria pasó por distintas etapas, que exponemos muy brevemente:
-Etapa existencialista, algo costumbrista
y pesimista: se fija en el tipo de vida del ciudadano uruguayo de vida urbana.
Presenta su vida anodina, su falta de ilusiones, su chato horizonte
existencial, aunque posee vislumbres de que existe el amor y la felicidad más
allá de su rutina oficinesca. Poemas de
la oficina es un título muy conocido de esta fase.
-Etapa de denuncia social y compromiso
político: Benedetti adopta posiciones de izquierda, participa activamente en la
formación del Frente Amplio, con un programa progresista. Aquí su literatura se
hace combativa; denuncia las injusticias sociales, las iniquidades y violencias
contra los humildes, carentes de oportunidades, con un horizonte vital
negativo. Apoyó firmemente la revolución cubana de 1959. Contra los puentes levadizos es un poemario representativo de este
ciclo.
-Etapa del exilio: en 1973 los militares
uruguayos dieron un golpe de estado y ejercieron el poder con violencia
criminal. Reprimieron a los enemigos del régimen e impusieron su ideario
conservador e inmovilista. Benedetti se fue al exilio; finalmente recaló en
España, donde vivió hasta el final del exilio. Geografías es un poemario ejemplar de esta época.
-Etapa del “desexilio”: en 1985 Uruguay
recuperó la democracia y Benedetti regresó a su patria. También supuso un
esfuerzo de adaptación, pues todo había cambiado y hubo de reconstruir su
contexto social y familiar. La vida ese
paréntesis representa esta etapa creativa.
-Etapa intimista final: desde el año 2000
aproximadamente la literatura de Benedetti se hace más melancólica, intimista y
reflexiva. Testigo de uno mismo es su
último poemario en vida y ejemplariza esta fase.
Benedetti alcanzó gran éxito editorial
(aunque la crítica se dividió en dos: unos lo alaban y otros lo critican por su
literatura fácil, sencilla, excesivamente popular y coloquializante), por lo
que lo acompañó la fama. Sus novelas más conocidas son La tregua y Primavera con una
esquina rota. Sus cuentos, muy hermosos, se leen con fruición, pues su
composición es original y muy lograda; su título más divulgado es Montevideanos.
Benedetti pretende escribir una literatura
entendible por todo tipo de lector, directa, transparente y transmisora de
valores éticos y de ideología política (de izquierdas). No engaña a nadie, en
este sentido. Se trata de una literatura para reflexionar y reaccionar,
dirigida a construir un mundo más justo y razonable, pues la organización de
las sociedades deja mucho que desear porque una parte grande de la población
vive en la pobreza, sin educación, sin sanidad y sin futuro de ningún tipo, y
eso es intolerable. Este pensamiento lo desarrolló en ensayos persuasivos.
7.
Interpretación y valoración
El poema que estamos analizando presenta
un contenido sombrío y pesimista. Se trata de una reflexión sobre la vida
humana, breve y fugaz. Apenas existen dos aspectos positivos, el descubrimiento
de las cosas y la vivencia del amor. Pero todo queda sumido en la nada, todo lo
traga la muerte para siempre.
No estamos ante un poema de contenido
político o sentimental, sino existencial y filosófico. El sujeto lírico
contempla el paso de la vida como un mero paréntesis en el gran libro de la
nada, del “no ser”. La sencillez léxica y la estructura circular del poema
crean una falsa sensación de ligereza de pensamiento, pero las cosas son más
tristes y tétricas.
2. PROPUESTA DIDÁCTICA
(Las siguientes actividades
se pueden realizar de modo individual o en grupo; de manera oral o escrita; en
clase o en casa; utilizando medios tradicionales o recursos TIC, según las
circunstancias lo aconsejen).
2.1. Comprensión lectora
1) Resume el poema (100 palabras,
aproximadamente).
2) Señala su tema principal y los
secundarios.
3) Delimita los apartados temáticos,
atendiendo a las modulaciones de sentido.
4) Analiza los aspectos métricos y de
rima; deduce la estrofa empleada.
5) ¿Qué tono tiene el poema: positivo,
optimista, esperanzado, o todo lo contrario?
6) Señala las imágenes más importantes que
jalonan el poema, sobre todo referidas a las percepciones sensoriales al mar, y
cómo impactan en el poeta y, después, en el lector.
7) Localiza y explica una docena de
recursos estilísticos y cómo crean significado.
2.2. Interpretación y
pensamiento analítico
1) ¿Qué palabra es la que más se repite en
el poema y sirve para nuclear el sentido del poema?
2) La poeta, ¿qué sentimientos
existenciales muestra?
3) Localiza las imágenes que explican la
esencia de la vida humana.
4) ¿Cómo se aprecia en el texto el
recorrido de la vida, del nacimiento a la muerte?
5) ¿Qué es lo primero que hace el hombre
al nacer y al morir? ¿De qué son imagen?
6) Interpreta el verso final: “el no ser
sigue para siempre”.
2.3. Fomento de la
creatividad
1) Elabora un poema o texto en prosa que
exprese una manera de concebir la vida, real o imaginaria a través de la
identificación de esta con un proceso, o un elemento natural y concreto. Puedes
imprimir un sentido intimista, como ha realizado Mario Benedetti.
2) Imagina y transcribe una conversación o
plática entre la clase y el poeta Mario Benedetti a propósito de su poema y de
su vida.
3) Realiza una exposición sobre Mario
Benedetti, su poesía y su tiempo, para ser presentada ante la clase o la
comunidad escolar, con ayuda de medios TIC o pósteres, fotografías, pequeña
exposición bibliográfica, etc.
4) Aporta o crea imágenes
que sirvan para expresar un modo de concebir la vida del hombre, siguiendo el
ejemplo de Mario Benedetti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario